viernes, 12 de junio de 2009

UNA VISIÓN CIENTÍFICA REVOLUCIONARIA

Por:
S. ALDO CHARRIS PINO
LENIN COBA GONZÁLES
SIVER IGLESIAS.


En el marco de una concepción investigativa con perspectivas hacia una teoría de revoluciones científicas. Este trabajo se ajusta de forma paralela a todos los parámetros propuestos desde una mirada teórica ideada por Thomas S. Kuhn, quien estableció que la ciencia normal no es más que una concepción acumulativa del desarrollo científico, que no va más allá de avances simples en los que solo se añaden algunas unidades generales, conservándose idénticas todas las demás partes del proceso de desarrollo científico. Para Kuhn la ciencia normal se establece al aplicar las operaciones de retoque al desarrollo científico. Por otro lado, entre todos los objetivos de la ciencia normal no existe ninguno que plantee nuevos tipos de fenómenos, por lo tanto la investigación desde la ciencia normal se orienta hacia la articulación de los fenómenos y teorías ya suministradas por el paradigma, las áreas investigadas por la ciencia normal son minúsculas, no obstante, son esenciales para el desarrollo de la ciencia ya que al centrar la atención en un rango pequeño de problemas relativamente recónditos, los científicos se verán obligados por el paradigma a estudiar la naturaleza de manera más detallada y profunda, lo cual sería inconcebible al hacerlo de otro manera. Pero de esto se hablará más adelante, por lo pronto se tocará el tema de los paradigmas según la concepción de Kuhn, estos son una especie de modelo o patrón científico que ha sido aceptado de acuerdo con las condiciones en las que se articulen y especifiquen constantemente evidenciando novedad y rigurosidad a tal punto que esa aceptabilidad siente precedentes. Los paradigmas alcanzan su posición en el momento en el que consiguen más éxitos que sus contrincantes a la hora de resolver algunos problemas. Pero el éxito de un paradigma en sus inicios es solo una promesa de éxito que se detecta en ejemplos seleccionados e incompletos. Es entonces cuando entra la ciencia normal y actualiza estas promesas, actualización que se logra extendiendo el conocimiento de los hechos que el paradigma exhibe como especialmente reveladores, aumentando la medida en que esos hechos encajan con las predicciones del paradigma (predicciones teóricas), de manera que el paradigma se ve también articulado con la teoría al momento de aplicársele el proceso de actualización hecha por la ciencia normal.

Kuhn plantea que la ciencia normal completa y perfila el campo de la investigación por medio de la articulación de las teorías y del mismo paradigma; esto quiere decir, que la ciencia normal propicia la unión entre los hechos y las predicciones que arroja la teoría, con esto el científico que hace ciencia normal está obligado a explicar la naturaleza de las cosas por medio de la observación y la experimentación al mismo tiempo que compara los hechos con las predicciones de la teoría de su paradigma. La labor del científico debe estar tan ajustada a la naturaleza que es imprescindible resolver toda clase de ambigüedades y problemas que surjan durante la investigación. Sin embargo, no siempre todos los problemas de la investigación son esperados como tales, sino que surgen de manera extraordinaria e inesperada, es decir, que no concuerdan con los presupuestos que se tiene para la investigación y se presentan como problemas aleatorios o fortuitos. Estos problemas Kuhn los ha llamado Enigmas. Un enigma puede tener una solución, varias o ninguna y el investigador profesional debe poner a prueba sus conocimientos su ingenio para resolverlo. Kuhn plantea que los paradigmas deben capacitar a la comunidad científica para la solución de estos enigmas abarcando un compromiso que genere una serie de reglas que contribuyan a ordenar el mundo, entonces el paradigma genera estas reglas y aquí es cuando la ciencia entra en un estado de crisis y estas reglas son las que pueden brindar un poco de seguridad al momento en el que se presenta una inseguridad creciente en el paradigma. Kuhn habla acerca los hechos y los denomina Factum, refiriéndose a éstos como experimentos y observaciones comprobables que estimulan una extensión del conocimiento, con ello los científicos informan acerca de los resultados de sus investigaciones corrientes.
Por otro lado, Kuhn sugiere que los resultados obtenidos mediante la investigación normal son significativos ya que incentivan el aumento y la efectividad de una forma óptima, mediante la aplicación de los paradigmas. El resultado ayuda como un adelanto al investigador, por ende, resolver un problema es hallar lo que se prevé de un modo nuevo.

Por último, se plantearán los tres tipos de núcleos o focos normales de investigación científica fáctica:

En primer lugar, están las clases de hechos que, según ha mostrado el paradigma, son especialmente reveladores de la naturaleza de las cosas. Este foco de investigación científica normal ha alcanzado gran reputación no por la novedad de sus descubrimientos, sino por la precisión, confiabilidad y amplitud de los métodos que se han desarrollado para determinar de nuevo un tipo de hecho previamente conocido, esto quiere decir, que los diferentes aportes científicos del pasado han sido ampliados de manera más precisa y confiable por científicos contemporáneos que han puesto en desarrollo a la ciencia a través de la extensión metódica de los aportes hechos por científicos del ayer. Un ejemplo de esto se ha dado en el campo de la astronomía y las aportaciones contemporáneas que se le ha incluido como: la posición y magnitud estelar, los periodos de eclipses de las binarias y los planetas; en el campo de la física, los pesos específicos y la comprensibilidad de los materiales, la longitudes de onda y las intensidades espectrales, entre otros. En segunda instancia está el foco que trata de la diferentes predicciones extraídas de la teorías paradigmática. Consta del trabajo empírico emprendido para articular la teoría paradigmática, resolviendo algunas de sus ambigüedades residuales y permitiendo la resolución de problemas sobre las que anteriormente se había limitado a llamar la atención. Un ejemplo que se evidencia en este foco de investigación fáctica serian los experimentos de Boyle que no habían sido concebibles hasta que se interpretó el aire como un fluido elástico al que se podrían aplicar todos los conceptos elaborados en la hidrostática. El tercer y último foco se ocupa más de los aspectos cualitativos de la regularidad de la naturaleza que de los cuantitativos, se precisa entonces experimentos para elegir una de las maneras alternativas de emplear al paradigma en la nueva área de interés. El ejemplo que esclarece este foco es el relacionado con las aplicaciones paradigmáticas de la teoría calórica que versaban sobre el calentamiento y el enfriamiento por mezclas y por cambio de estado. Sin embargo el calor se podía ceder o absorber de muchas maneras, como por ejemplo por combinación química, por fricción y por comprensión o abstracción de gas, y a cada uno de estos otros fenómenos de la teoría podía aplicarse de diversos modos. En conclusión, estos focos de investigación fáctica caracterizan a la ciencia normal, dándole categoría a nivel de comprobación, observaciones y aplicación de teorías, es decir, hechos que se articulan mediante la actualización de promesas propuestas por la teoría articulándose en los paradigmas.


Tomado de Thomas Kuhn. The Structure of Scientific Revolutions.